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Esta jornada de miércoles 29, nos sorprendimos con la noticia de la partida a la inmensidad del destacado poeta iquiqueño y del barrio El... Sergio González, ante fallecimiento del poeta morrino: «Alberto Carrizo Olivares hizo su último poema al saltar al infinito».

Esta jornada de miércoles 29, nos sorprendimos con la noticia de la partida a la inmensidad del destacado poeta iquiqueño y del barrio El Morro, Alberto Carrizo Olivares, hombre sencillo y prolífero creador de poemas y otros escritos. Había nacido 17 de febrero de 1935.  Quien fuera uno de sus amigos cercanos, el Premio Nacional de Historia, Sergio González, escribió un homenaje, que dejamos al final de esta nota.

Alberto carrizo era profesor de educación general básica, especializándose en castellano, tuvo  a su haber numerosas publicaciones. Fue Presidente de la filial Iquique de la Sociedad de Escritores de Chile desde 1998 hasta 2013.  Desarrollo parte de su vida en la región de Antofagasta. Entre los años 1962 y 1966 fue alcalde de Tocopilla, creador del himno de esa ciudad, que compuso junto al músico Jorge Mella. En la actualidad estaba jubilado.

El funeral del poeta, se realizará este jueves 30 de septiembre, a las 16.00 horas en el cementerio Parque del Sendero.

HOMENAJE DE SERGIO GONZÁLEZ

Este miércoles 29 de septiembre, Alberto Carrizo Olivares hizo su último poema al saltar al infinito. Lo hizo con una vasta obra bajo el brazo, la que se compone no solo de poesía, su género preferido, sino también ensayos y piezas líricas, porque como buen profesor de esos tiempos ilustrados, dominaba el violín.

Compartimos muchos momentos notables, como un viaje inolvidable al Cusco, donde su hermetismo y seriedad de maestro fueron reemplazados por la alegría de un joven y la curiosidad de un niño.  Aunque, lo que me quedó en la memoria a fuego fue la despedida definitiva del poeta Andrés Sabella en 1989 en la Catedral de Iquique, donde la voz de Alberto retumbó con amplitud de tenor.

Un poeta iquiqueño, morrino, le construía con palabras andenes de sal a otro poeta, antofagastino, marinero, caminara a la eternidad. Los mismos andenes que ahora cruzará Alberto.

Cuando compilé glosarios y voces empleadas en la pampa salitrera, Alberto escogió una palabra por cada letra y creó una definición poética. Me permito compartirlas con ustedes porque son prácticamente desconocidas:

AGUA VIEJA: Rémora sin progenie concebida

BOTARRIPIOS: estatuas vaciando en vano sus futuras estatuas.

CAMANCHACA: aguabrisa de pollera larga garuando melancolía en el ojo.

CHEI: amarte era un axioma en contra de los rituales de la lengua.

DESMONTE: en este sabanal sin sueño la pala es el único lirio visible.

EMPAMPADO: las uñas hicieron ruta del ombligo bocabajo, pero en vano.

FICHA: hostia del llanto, pequeña mártir de la plusvalía.

GUARDAHILOS: antepasados del murmullo adelantados del mitin.

HUINCHERO: era desmontar el mundo sentado entre mágicas palancas sin intuir el diluvio.

IRIS:  nó el ojo nó la mujer sólo la puerta abierta aleteando calaminas.

JAIBÓN: gozoso antónimo del pantalón encallapado.

KERIMA: un cerco te diseca el acto íntimo de crecer.

LONGINO: pitazo viajando aún en traqueteo largo el nunca olvido.

MANCOMUNAL:  descubrimiento astuto de la palabra Somos.

NORIA:  útero de la sed.

ÑOCO: abismo al que asomaban niños profetizado el fin.

OJOTA: aún trajinas la camanchaca, amartelando un dolor.

PATO: ojo untando la tiniebla con un latido más.

QUESO: pan añejo esperando la nueva hora del hartazgo.

RAJO: nido para entibiar la idea, fosa común de la verdad acorralada.

SERENO: ángel terreno cautelando el gran despojo.

TIZNADO: panificador de la fuerza, adán del sudor negro.

ÚLTIMOS INFIERNOS. Estación terminal del turno “C” del medio.

VOLANDA: vaivén de la urgencia urgente recado a la nada.

WILLIAMSON: un nombre te abrió la puerta, pero te dejó en soledad.

YAPA: ilusión óptica sólo veraz entre niños.

¡Avísale Alberto!: saludo de despedida con mensaje de augurio en clave morrina.

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